Este joven cantante sudafricano fue una de las grandes revelaciones del 2016 por su álbum Blue Neighbourhood, que presentaba temas sensibes, melancólicos y humanistas, sin revestirlos de efectos en los arreglos. Aunque sin una gran voz, Troye Sivan convenció a la crítica por un pop tranquilo, pero que refleja los sentimiento de los jóvenes en la actualidad (una propuesta parecida a la de Mika hace 10 años, pero no tan explosiva). El single My Youth tuvo un gran éxito en la primavera, ocupando el Top 30 en Estados Unidos, Tiene asegurado un segundo CD con un buen apoyo publicitario.
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