¿Pensaron que Sean Penn era la única estrella de su familia? No; aparte de su padre Leo (director) y su hermano Chris (actor, ya fallecido) está el músico Michael, quien en 1990 debutó con el álbum March, sumamente exitoso y aclamado por la crítica. En ese disco, el cantante mostró un gran talento con canciones de rock-folk nada aburridas (no tenía rellenos). Estaba, naturalmente, su influencia de Bob Dylan y los Beatles, pero aparte de letras sumamente interesantes, Michael Penn tenía un plus: que no se creía un intelectual. Por el contrario, quería ser tomado en serio, pero sin perder los toques accesibles. El éxito del primer single de March, -No Myth- fue tal, que aparte de ocupar el Top 15 del Hot 100, obtuvo un premio MTV por el video al Mejor Nuevo Artista. Sin embargo, su segundo CD, Free For All, de 1992, fue un fracaso, por lo que Penn no se dio por vencido y optó por escribir música para películas, siendo uno de sus trabajos clásicos el que hizo para el filme Boogie Nights, de 1997. No Myth permanece como un clásico -aunque olvidado- del rock alternativo, y uno de los mejores hits de 1990.
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