Living Things, el quinto álbum de la banda Linkin Park, no fue mejor que sus dos anteriores producciones, pero de nuevo resultó todo un éxito de ventas. El estilo de su rock (que combina rap y arreglos electrónicos) los hace ya unos veteranos, con un sonido fresco que resulta atractivo hasta para nuevas generaciones. Aunque tuvo varios sencillos brillantes, el mejor fue definitivamente el primero, Burn It Down (producido por Rick Rubin), y eso es algo que distingue mucho a Linkin Park: la primera probada que dan de sus álbumes resulta una explosión que convence a cualquiera. Esta canción fue número 1 tanto en listas de Modern Rock como en las de Rock, además de ocupar el Top 40 pop.
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