Justin Timberlake reapareció en el 2018 tras varios años de la escena musical con Man Of The Woods, un álbum cuyo contenido fue variado en los estilos, pero en el fondo defendió el pop de calidad. Antes de su presentación en el Super Bowl, Timberlake lanzó Filthy, un espectacular track funky con toques electrónicos que con su explosivo video lo llevó una vez más al Top 10 de Billboard. La madurez de Justin como artista lo mantuvo en el gusto del público este año, aunque hay que resaltar que el éxito de sus singles -a pesar de los toques de perfeccionismo en la producción- fue moderado.
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