Jason Mraz lo tenía todo tras ese hit que obtuvo hace varios años, I'm Yours. Pero en el 2012, con un look horrible, regresó y lanzó esta horrible balada soporífera, I Won't Give Up, con una letra aparentemente edificante. Lástima, porque el segundo sencillo de su CD era mejor, pero ya era demasiado tarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Tienes un comentario a algún post? Compártelo aquí