Para su cambio de disquera,
Kylie Minogue decidió arriesgarse y llevar a cabo un experimento: grabar un
álbum de música country. Al final eso resultó falso, porque Golden fue un CD de
música pop como muchos otros de la cantante, pero que en sus arreglos contó con
ciertos toques de country, en su mayoría programaciones de sonidos de aplausos
que invitan -a veces- a bailar, pero que ni siquiera llegan a un hoedown puro.
Eso sí, aunque el álbum contó con un exceso de canciones, tuvo sus buenos
momentos, como el dance de Low blow, la excelente balada Shelby ’68, y tracks
muy en el estilo de Kylie, como Golden y el single Dancing. Cuando ella se
acerca más al country-pop que hacía Shania Twain, el resultado fue mucho mejor
que lo que ha intentado Miley Cyrus, lo cual es un gran cumplido.
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